Con pequeñas actitudes podemos re-direccionar la energía y comenzar un día en forma armónica y beneficiosa para nuestros propósitos. Solo tenemos que aprender a visualizar lo que sentimos que es para nosotros y trabajar enfocándonos en ello, sin dispersar nuestra potencia interior.
Veamos algunas claves para armonizar el comienzo de cada nuevo día, tomando registro y conciencia de lo que nos rodea y de lo que portamos en nosotros mismos. De esta forma estaremos presentes en cada aprendizaje que nos toca transitar y habilitados para disfrutar de todo lo que, día a día, se nos concede. Pero para eso, necesitamos recordar cómo “Ver” lo que nos pasa, aprendiendo a leer la vida con una nueva perspectiva.
Bendecir tu mundo: Al despertarte, destiná un momento para tomar registro de aquello que portás: Tu cuerpo tal cuál es, tus habilidades, tu entorno, el espacio que habitás y que conseguiste para vos mismo y al cual destinaste tiempo y energía para que se vea, justo, como luce hoy. Bendecí tu centro, tu lugar en el presente y en la tierra, el camino que venís recorriendo. Bendecí, también, tus sueños, tus esperanzas, y los aprendizajes que has podido ir recolectando hasta ahora.
Embellecer agradeciendo: Una vez que bendeciste lo que sos, recordándote cuán sagrada y especial es tu presencia y tu misión, intentá enfocarte en agradecer por aquello que consideres que es abundancia en tu vida. Las amistades que nutren tu camino, la posibilidad de viajar o estudiar y formarte, la expansión de conciencia que pudo haber llegado a vos a través de un compañero, un libro o una clase de Yoga. No hay manera más efectiva de embellecer el Universo que el ser amorosamente agradecidos.
Acercarte a la vida: No te quedes al margen de lo que te rodea. Anímate a lanzarte de lleno a la profundidad de la experiencia, comprometiéndote con lo que elegís y con lo que te inspira. En dónde decidas nadar, asegúrate de zambullirte. Te compartimos esta nota que puede ayudarte: http://serpositivo.tv/?p=443 .
Quedarte donde te llegue el sol: Apostá a lo que te hace bien, a lo que verdaderamente le aporta algo a tu vida: Amor, color, inspiración, sabiduría, comprensión o, simplemente, calma. Te dejamos esta nota anterior para reconsiderar la importancia de enamorarte de vos y cuidarte: http://serpositivo.tv/?p=449 . Sea donde sea, que tu lugar te brinde la luz necesaria para que puedas florecer desde adentro. Porque no hay nada que pueda brillar más que vos, cuando te sentís pleno.