Hoy trabajaremos con un ejercicio de visualización que ayudará a balancear tu estado interno. Te invitamos a relajarte y utilizar tu poder para imaginar:
Te vas a recostar en algún lugar tranquilo donde sepas que no van a interrumpirte y en el cual descansarás durante la próxima media hora. Vas a cerrar los ojos sin apretarlos y comenzarás a respirar inhalando y exhalando siempre por la nariz. Cuando te sientas relajado, vas a activar tu imaginación visualizando cómo una energía en forma de luz que puede ser dorada, blanca o del color que vos la sientas, ingresa por tu cabeza, zona coronilla y va recorriendo todo el cuerpo, dirigiéndose hacia abajo.
Imaginá, también, cómo esta luz limpia toda la zona de la frente y aclara los pensamientos, disolviendo cualquier tensión o preocupación que te pudiera estar molestando. La energía purifica y se lleva todo.
Esta misma luz continúa su viaje y sigue bajando. Pasa por los hombros, por el pecho y por la espalda. Allí, alivia sentimientos o emociones que estuvieran presionando esa zona o recargándote con falsas responsabilidades. Soltás el pecho y suavizás el corazón.
Ahora, esa misma energía pasa por tu estómago y tu abdomen, activando toda tu zona creativa.Te libera de estructuras y sana tu libertad. Sigue haciendo su recorrido y baja por las piernas, relajándolas y volviéndolas más livianas. Llega a los pies y te conecta con tu camino. (Podés pedir que te lleve a donde tengas que estar en este momento de tu vida personal).
Para terminar, visualizá cómo una misma energía entra por tu cabeza y sale por tus pies, en un circuito continuo que recorre y renueva todo tu organismo, tu cuerpo y tu aura.
Seguí respirando y quédate todo el tiempo que quieras para relajarte y asentar la meditación. Para levantarte, hacé movimientos en los pies y en las manos y volvé despacio para no marearte o desorientarte.
Las técnicas de visualización son súper efectivas y facilitan la concentración en aquellos que encuentran dificultades para aquietar la mente. De esta forma, la energía se mantiene enfocada y al crear una imagen, facilitamos la sanación y la asimilación de la energía que intentamos promover.