Hacé el ejercicio de revisar en dónde estás invirtiendo mayor atención. ¿La mayoría de tus pensamientos son acerca de lo que te preocupa y te atemoriza o acerca de aquello que te ilusiona y te inspira?

El Arte de visionar

Una de mis maestras, siempre me hablaba del poder de la visión. De cómo necesitamos aprender a visualizar aquello que queremos materializar en nuestra vida. El arte de envisionar es la capacidad de crear en nuestra mente la imagen concreta de cómo se ve, cómo huele, cómo se oye, cómo se siente nuestro objetivo.

Se trata de unificar tu energía, aprendiendo a concentrarte en aquello que efectivamente querés que llegue  a tu vida, en vez de ocuparte constantemente de aquello que te atemoriza o querés evitar.

Recordá que tu visión es tu poder

Donde ponemos nuestra atención, allí también va nuestra energía, entonces revisá si tus visiones internas te aportan vitalidad o te drenan tu poder. Dale tiempo y recursos a lo que te hace bien. Porque visualizar tus propósitos, es el primer paso para manifestarlos.

Estoy segura de que no tenemos ni siquiera una mínima porción de idea de cuán poderosos podríamos ser si, tan solo, nos concentráramos verdaderamente en la belleza y en la abundancia que queremos crear.

Rompe tus propias barreras, animándote a soñar (Con todas las letras, con todos los números, con todas sus fragancias) aquello que querés para vos.