Dos cosas son ciertas: Todos creemos en algo (o en alguien) y todos, en algún momento, necesitamos asistencia, ayuda. Hoy queremos sumar la energía de dos Diosas poderosas a las cuales podemos rezarles, orarles e invocar cuando necesitemos recuperar nuestra fortaleza, nuestro coraje y la vitalidad en nuestro corazón y en nuestra mente para seguir adelante.
Diosa nórdica Freyja: Para la cultura Nórdica, Freyja era la Diosa de la fertilidad, la celebración y la pasión. Su energía y sus aspectos principales representaban el coraje, la audacia y la fuerte potencia creadora y transformadora de la mujer y de la Tierra. Recurrí a ella cuando necesites afrontar aventuras y desafíos, cuando la situación presente te demande valor y coraje para animarte, sin caer en lo seguro o en lo conocido. Y, en honor a ella y a vos, recordá celebrar tus logros y tus éxitos cuando los concretes. Tus abundancias deben celebrarse y honrarse.
Diosa egipcia Sekhmet: Esta diosa de la cultura egipcia representa la energía del sol y la fuerza de los leones. Su mensaje y su medicina está asociada a la fortaleza personal y a la capacidad de lucha por nuestros resultados. Ella te ayudará a visualizarte victoriosa y abundante, te recuerda que sos muchísimo más fuerte y resistente de lo que vos pensás. Ella nos dice que somos encarnaciones de la fuerza y no de la dependencia o el victimismo. Recurrí a ella cuando sientas que tus objetivos no salen por culpa de otras personas o de situaciones ajenas a vos y a tus esfuerzos. Ella te conectará con tu potencia y tu fortaleza para traspasar las barreras.
Una forma de hacerlo con respeto y amor
- Prepará un lindo altar o espacio sagrado, decoralo con flores y objetos que te ayuden a centrarte, calmarte y te recuerden tu conexión con la espiritualidad. Respetate y hacelo a tu gusto y con intuición. Si pudieras, sería ideal que aportes una imagen o dibujo que represente a la Diosa que elegiste.
- Tomá unos instantes para centrarte respirando por nariz, en forma lenta y profunda, entrando en conexión con tu energía interna y con aquello que estás necesitando armonizar.
- Cuando te sientas lista, invocá la energía sanadora de la Diosa y con respeto y con humildad amorosa pedile asistencia personal.
- Siempre que hagas un pedido, tené presente que el resultado sea para el mayor bien, sin interferir en los planes de otras personas, ni en otros caminos que no sean los tuyos propios.