Hoy, una receta sencilla que podés preparar en casa y agasajar tu cuerpo, ayudándole a tus pies a eliminar durezas, heridas y tensiones. Tus pies listos para andar nuevos caminos!
Exfoliante y purificador con ingredientes naturales:
- 1 cucharada de sal gruesa
- 1 cucharada de aceite de girasol
- Gotitas de jugo de limón (Aclara y limpia)
- Mezclá los ingredientes hasta formar una pasta homogénea y aplicá por tus pies, realizando masajes circulares con cierta presión para remover los residuos.
- Enjuagá con agua tibia o agua de rosas para aliviarlos, aún más.
Extra tip
Mientras masajeás tus pies y los relajás, visualizá y concéntrate en aquellos caminos y formas que ya no querés continuar transitando. Liberate, dejándolos ir.
Antes de poder nutrirnos y curarnos, siempre necesitamos pasar por la fase de limpieza, de soltar, de ablandar aquello que debe irse de nosotros. En tu cuerpo, en tu mente, en tus relaciones y en tu vida entera, la purificación es la clave para volver a empezar de cero y con mejores resultados.