Al ser una terapia tan flexible, podemos nutrirla y combinarla con diferentes herramientas de armonización y desarrollo personal. Hoy te compartimos una forma distinta de optimizar tu sesión:
En mi experiencia personal, he podido comprobar que una de las técnicas que me resultaba muy efectiva a la hora de combinar mis sesiones de Reiki, era utilizar afirmaciones para dirigir mayor energía hacia mí misma o hacia quién estuviera recibiendo la sesión.
Del mismo modo, que enunciar afirmaciones nos sana y nos ayuda a ganar seguridad y firmeza personal, mejorando nuestro estado mental volviéndolo más positivo, así también nutrimos nuestra sesión de Reiki uniendo afirmaciones que se relacionen con el propósito que estemos trabajando en cada sesión.
Por ejemplo, si hemos recibido a alguien que nos cuenta que se siente angustiado o con falta de esperanza, podemos sumar, internamente, afirmaciones que le induzcan a recobrar su alegría, su entusiasmo y su vitalidad. Las pronunciamos internamente, al mismo tiempo que enviamos la energía Reiki a su zona del corazón y plexo solar y, duplicamos el efecto reforzando la sanación.
Si, en otro caso, estuviéramos trabajando con alguien que acude a la sesión por motivos de inseguridad o falta de autoestima, podemos utilizar afirmaciones que promuevan el coraje y la firmeza personal, cuando enviamos Reiki a su zona del Chakra base, a sus piernas y a sus pies.
Recordemos que las palabras transportan una vibración y que al enunciarlas o concentrarnos en ellas, las estamos impartiendo e irradiando a nuestro alrededor. La intención refuerza la sanación.