A todo el mundo le pasa que suele tener poco tiempo para entrenar, ir al gimnasio, a yoga o hasta a dar unas vueltas al parque (salvo que tengamos la suerte de poder pasear al perro tranquilos).
Lo bueno es que la versatilidad del yoga permite que puedas practicarlo donde quieras, mientras tengas una colchoneta o alfombra para no lastimarte. Acá, te mostramos algunas de las posturas que podrías realizar sin ningún problema ¡en el living de tu casa!
La cobra
Según un artículo de Marie Claire, la manera correcta de realizar esta posición es colocándote boca abajo sobre el suelo, con las piernas juntas y estiradas y los brazos doblados, con las manos apoyadas en el piso a la altura de los hombros. Levantá el torso del suelo manteniendo las piernas pegadas al suelo y sujetándote con los brazos, bajando los hombros y elevando la barbilla de manera que mires ligeramente hacia arriba.
Mantené esta postura durante 30 segundos, descansá tumbada boca abajo y volvé a hacerla 30 segundos más. Con la cobra podemos trabajar la parte superior de la columna, ya que ayuda a mejorar los músculos espinales, estimula los órganos internos, amplía la expansión torácica y beneficia la zona lumbar.
Anjaneyasana
La también denominada postura de la luna creciente ayuda a fortalecer los tobillos y las piernas, además de regular el sistema digestivo. A pesar de ser muy beneficiosa para la salud, si sufrís problemas de corazón, es preferible que no la hagas, como recomienda un artículo del sitio especializado Sport Adictos.
Para hacerla, comenzá sentándote sobre tus talones y elevá la pierna izquierda, apoyando la planta del pie firmemente en el suelo. Llevá el tronco hacia adelante estirando la pierna derecha y apoyá tus manos sobre la pierna doblada.
Relajá los hombros y los brazos y llevalos por detrás de tu cabeza, arqueando la espalda y trasladando la mirada hacia el cielo. Uní las palmas de tus manos e inspirá aguantando la respiración durante 10 segundos. Después, respirá normalmente y repetí la posición con las piernas invertidas.
El bebé
Se trata de una postura totalmente opuesta a la Cobra. Como indica Marie Claire, lo que hay que hacer es ponerse de rodillas y apoyar los glúteos en los talones. Tirar el cuerpo hacia delante, apoyando la frente en el suelo y dejando los brazos a los lados. Mantenerse así unos 30 segundos.
Perro boca abajo
Ubicate en la posición del bebé y, con la ayuda de los talones sobre el suelo, estirá las piernas en simultáneo a los brazos, de modo que tu cuerpo forme una V invertida, como si fuera una carpa. Dejá caer la cabeza entre medio de los brazos y flexioná ligeramente las rodillas si sentís los músculos muy tensionados, como indica Sports Adictos.