Tu cuerpo refleja tu estado interior. Entonces, un organismo tensionado, adormecido o demasiado rígido trae como consecuencia un pensamiento poco creativo, limitado a estructuras conocidas y ensimismado, provocando que te pierdas gran parte de lo que pasa a tu alrededor. Hoy te contamos cómo el trabajar tu cuerpo te aporta un pensamiento más positivo y potencia tu creatividad y capacidad de adaptación.
- De una nueva postura, surgen nuevas perspectivas: Flexibilizar y trabajar con tu cuerpo, te permite comenzar a mirar con nuevos ojos lo que te rodea. ¿Por qué? Muy sencillo, porque dejas de ensimismarte en un pensamiento circular y te ocupas de otra cosa. Al movilizar tu cuerpo, tu energía deja de enfocarse en los problemas y aparecen, creativamente, las soluciones, las ideas y las respuestas que tanto buscabas.
- Estirarte te permite dejar de controlar: Al realizar estiramientos y trabajos de elongación corporal, estamos trabajando también nuestra tendencia a tener todo bajo control. Porque cuando relajo mi cuerpo, me estoy entregando, me estoy soltando. Entonces, potencio la confianza en el Universo y en el fluir natural de las cosas. Durante ese proceso, se libera y se expande nuestra creatividad y espontaneidad.
- Reducir estrés mental, libera espacio para lo creativo: En esos días en lo que no sepas qué hacer con tus ideas y tu pensamiento se vuelva circular o abrumador, toma la acción ocupándote de tu cuerpo. Recordando, siempre, que donde ponemos nuestra atención, es donde hacemos crecer algo. Entonces, lo más sano para recuperar nuestra creatividad en momentos difíciles es volver a nuestro centro, haciendo ejercicio, dedicándonos paseos al aire libre o brindándonos una cálida sesión de auto Reiki.
De esta manera, estaremos liberando la tensión mental y nos relajaremos generando apertura para lo nuevo y más limpio. Tu creatividad es tu gran poder de transformar la realidad. Depende de vos potenciarlo o reducirlo.
Activar tu creatividad expande tu vitalidad
Muchas veces la falta de energía y vitalidad se debe a que estamos estancados por fuera y por dentro. Sin embargo, cada vez que trabajás tu creatividad y tu espontaneidad, hacés espacio para una nueva energía en vos:
Cuando no nos permitimos innovar en ningún aspecto de nuestra vida, la energía comienza a volverse obsoleta. Lo rutinario en el exterior, intoxica tu interior ya que no permite el ingreso de algo limpio, algo diferente, algo nuevo. Y ¿Qué son las sorpresas, si no son esto?
Trabajar tu parte creativa, te ayuda a expandirte mentalmente, a encontrar caminos que no estaban en tus planes ni en tus diseños. Siempre que puedas, permitite actuar en forma creativa, embelleciendo algo, transformándolo con tu aporte, practicando alguna actividad que te saque de tus límites internos o frecuentando amigos que te muestren otros puntos de vista.
Siempre hay algo que podemos hacer para mejorar lo que ya existe. Preguntate (Más) cómo y (Menos) por qué. Sentite en plena actividad creativa y vas a comprobar lo saludable que es para tu cuerpo y para tu mente el accionar desde el arte y la libertad.
¿Cómo se siente tu energía después de realizar deporte, después de una clase de baile, después de una jornada de emprendimientos? Imaginate lo que pasaría en tu vida si te permitieras expandir esta creatividad en forma más frecuente…
No hay nadie que no sea capaz de crear. Todos, en alguna parte nuestra, tenemos potencial para dar vida y para transformar. Usémoslo para el mayor bien, para la mayor belleza y revitalicemos juntos nuestro cuerpo y nuestro mundo.