El año ya comenzó, pero pareciera que aún nos queda un tramo hasta reconectar con este nuevo ciclo laboral. Todavía tenemos tiempo de entrenarnos y disponernos con una mejor actitud para que este 2015 mejoremos y activemos nuestra abundancia personal.
Resetea tus creencias porque no todo lo bueno tiene que ser difícil. Esta es una de las claves para sanar nuestra relación con la abundancia y disponernos a vivir una vida mejor, permitiéndonos recibir y disfrutar con mayor apertura.
Otro punto a tener en cuenta es no escatimar en tu disfrute ni en tu Felicidad, (Pero está claro que esto no significa derroche) porque si a lo largo del año no nos permitimos disfrutar, descansar o participar de actividades que, simplemente, nos distiendan y nos inspiren, entonces nuestra abundancia de verá obstruida, ya que para que esta energía fluya es necesario estar dispuestos a recibir y a conectar con lo que embellece y nutre nuestra vida. Y, desde ya, que el trabajo y sacrificio no pueden ser lo único presente en nuestra agenda. Intentemos equilibrar nuestras jornadas entre nuestro compromiso con las metas y nuestro espacio para tratarnos como más nos gusta.
Conéctate con tu entorno y recuérdate acondicionarlo porque la energía que nos rodea y el espacio que ocupamos, habla mucho de nosotros e interfiere en el resultado de nuestro trabajo. Es muy importante sentirnos a gusto en nuestro lugar. Amemos nuestro espacio o hagamos lo posible para que sea inspirador, armónico y alegre.
Otra clave fundamental es enfocarnos en lo que sí tenemos y crear el hábito de agradecerlo. Cada vez con activamos un sincero agradecimiento y honramos lo que nos ha sido dado, despertamos la abundamos en nuestra vida. Porque atraemos lo que vibramos y lo que pensamos, entonces, disponernos a agradecer de corazón, es siempre una manera de cultivar nuestra abundancia personal.
Visualizar lo que deseamos lograr durante este año, resulta muy eficaz para comenzar a crear nuestra realidad. No se trata de vivir en nuestra mente soñando lo que quisiéramos sin activarlo, sino de crear imágenes que nos recuerden cuál es la meta que nos hemos propuesto para este momento y visualizarlo como si ya estuviera pasando. Por supuesto, no olvidemos trabajar con constancia y compromiso, pero sobre todas las cosas, manteniendo nuestra alegría e inspiración a lo largo del proceso.