La Meditación Trascendental (MT) en realidad comenzó hace décadas, en plena cultura pop: su popularidad se generó a finales de los ’60. Y la técnica fue llevada a los Estados Unidos en 1959 por Maharishi Mahesh Yogi, cuyos discípulos fueron, entre otros, los Beatles y Ravi Shankar, como indica un artículo de Vogue.

Tal vez sea tan beneficiosa esta práctica para la salud que un gran número de celebridades la están probando, como Jerry Seinfeld, Martin Scorsese, Oprah Winfrey, Clint Eastwood y Tim Burgess, quien le comentó al periodista de The Guardian Stuart Heritage que “es uno de los aspectos más importantes de su vida”. “La mañana es un gran momento para las ideas. No necesariamente ideas que cambien el mundo, sino por lo general algunas pequeñas acerca de cómo organizar mi día, cosas que he olvidado o planes y proyectos sobre lo que está ocurriendo”, sostuvo.

David Lynch, el precursor de la meditación trascendental

La moda de practicat la meditación trascendental fue impuesta por el director de cine David Lynch, cuya fundación enseña las técnicas de MT a grandes grupos en riesgo, como soldados que deben lidiar con la depresión y estrés post-traumático. Además, puede contribuir a que los niños sean más productivos en la escuela y tengan comportamientos menos peligrosos en lo que respecta al bullying.

Según Heritage, antes de comenzar a practicar MT, Lynch había explicado que estaba lleno de preocupaciones y ansiedades. “Cuando realicé mi primera meditación, esta felicidad interior se reveló tan poderosamente, que dije ‘esto es’. Todo empezó a mejorar, las cosas son naturales, sos feliz y no podés hacer nada para ir en contra de eso”, señaló el director.

Bob Roth, CEO de la fundación de David Lynch, y encargado de enseñarle esta práctica a la cantante Katy perry, explicó a Vogue que “lo que distingue a este tipo de meditación es el acercamiento específico a uno mismo y la manera en que se enseña”. Aprender MT requiere de varias horas de instrucción con un profesor entrenado, durante cuatro días consecutivos.

“Muchas técnicas de mindfulness buscan influenciar o cambiar el tipo de pensamientos y su contenido, además de la cantidad, para tratar de calmar la mente, pero esto requiere de mucho esfuerzo concentrado para poder dominarse, con el tiempo. La MT, en comparación, no necesita de concentración o control sobre la mente, es simple y sin esfuerzo se puede conseguir acceso a un nivel de la mente que yace dentro de todos, perfectamente calmo, silencioso y pacífico pero que, sin embargo, está muy despierto”, aseguró Roth.

Cómo practicar la meditación trascendental: dos cuestiones a tener en cuenta

Según Jeff Halevy, experto en salud comportamental, nutrición y ciencias del ejercicio, en un artículo de The Huffington Post, cuando realizamos esta práctica de meditación estamos condicionando nuestras mentes para que tengan nuevas reacciones para pensarse a sí mismas. Cuando tenemos un pensamiento, generalmente tenemos una de dos estas dos respuestas, o la combinación de ambas:

1) Emoción: pensaremos en algo que dispare cualquier tipo de sentimiento. No es necesariamente extremo, pero siempre pasa.

2) Acción: planeada o no, se generará una acción. Por ejemplo, si pensás “Tengo hambre”, como resultado vas y agarrás algo para comer o planificás tu próxima comida.