Ilusión de poder, miedo a perder

El martes se da inicio al nuevo año zodiacal con la Luna en Aries. Dejamos atrás la temporada Piscis que ha sido jugosa en material emocional, y arrancamos la carrera por el año 2020. Este inicio siempre está caracterizado por ser bien enérgico, luchador y algo competitivo, pero esta vez también tendrá la capacidad de implementar nuevas formas de pensar que incluyan los ideales más humanitarios. Es decir que hay una conciencia del actuar dentro de una sociedad mayor. Saturno en acuario hace que el control se vuelva más hacia el yo y que las relaciones aparenten frías y sin tanto tacto. Estas energías no serán bien asimiladas para los signos de Cáncer, Escorpio y Piscis, por lo que tenderán a replegarse y aislarse más de la sociedad. pero no hay que olvidar que el tacto cercano trae una experiencia enriquecedora y única que es totalmente intransferible, y que quizás a distancia sólo sea una oportunidad de madurar las relaciones abandonando el miedo a perder. La entrega es transformadora y trae una concienciación inmensa sobre el poder de la fe. 

Visión a futuro: adaptarse a los cambios

Con la posibilidad de adaptarse a los nuevos cambios, y con un tiempo en pausa, es bueno replantearse los errores y acierto del pasado para poder ajustar la perilla del futuro. Es decir que la fuerza disciplinadora que surge de nuestros adentros, puede moldear a una guerrera por la igualdad de todos los participantes de una sociedad. Tan solo conservando las viejas estructuras eficaces, y cambiando las que ya estaban obsoletas. Acuario desestabiliza los planes pero los vuelve más resistentes al cambio también, si es que pueden interiorizar esta capacidad de construir sobre lo maleable.

¡Alerta ansiedad! Lo mejor es para después

Como todas las Lunas Nuevas, la energía es inmensa pero aún no es del todo visible. Es decir que tanta energía ariana sin estar concientizar puede generar mucha ansiedad. Intenten descargar algo de la energía física, o hacer una actividad más repetitiva como pintar o armar un rompecabeza que agote su concentración. También es recomendable jugar a algún juego de mesa competitivo. Paciencia, que ¡lo mejor está por llegar!