A ellos les encanta y a vos te relaja y te conecta con las fantasías y las aventuras por un rato. Hoy te contamos los beneficios y todo el bien que les hacés a tus hijos cuando les contás y les leés historias.
Estimulás su creatividad: Cada personaje y cada escenario que les describís, provocan en ellos diferentes imágenes y sensaciones que, a través de su creatividad e imaginación, van completando y nutriendo. Les ayudás a pensar más allá de los límites, de los miedos y de la realidad cotidiana. Elegí historias que compartan valores que promuevan la educación que buscás para tus hijos.
Cultivás su capacidad de atención: ¡Y esto no es un rasgo menor! (Bien lo saben las mamás). Al narrarles o leerles las historias, naturalmente estimulás en ellos su concentración y la capacidad de mantenerse atentos a los detalles y conectados a la actividad que están realizando juntos. Esto beneficia mucho su escolaridad y su manera de comunicarse.
Les ayudás a dormir mejor: Muchos nenes sienten miedo o dificultades antes de dormir. Si dedicamos un momento a leerles las historias que más les divierten y los atrapan, lograrás que se conecten con lindas imágenes antes de irse a la cama y puedan cerrar el día en forma más agradable y hasta estimulando sus sueños.
Y lo mejor de todo es que compartís con ellos un momento por fuera de las normas y los límites, donde se dedican a imaginar, disfrutar y viajar con las historias que más les gustan.
¡Contanos cuáles son las historias que más inspiran a tus hijos!