La Licenciada en Nutrición y autora de “Nutrir mi Embarazo”, Alicia Crocco, explica en un artículo de Clarín que “muchas personas que suelen cuidarse con las comidas, en invierno dejen de hacerlo por el frío”, con la excusa de que “se requieren más calorías” para sobrellevar esta época. 

Esto es mitad verdad, mitad mito: lo que se necesita en invierno es seleccionar comidas calientes, sustanciosas y armónicas para que luego, cuando se vaya el frío, no hayamos aumentado considerablemente de peso.

Ejemplos de comidas ideales

Los guisos dietéticos son, por ejemplo, platos que se pueden incluir perfectamente en un menú semanal, según Crocco. Y más allá del frío, es necesario consumir vegetales, sobre todo ensaladas, para aportar al organismo los nutrientes de las frutas y verduras crudas.

Ideas y recetas

La cheff y coach nutricional de comida saludable y natural, Romina Molina, aconseja consumir alimentos variados y platos elaborados en esta época. Te mostramos algunos ejemplos ideales para comer equilibrada y saludablemente:

Guiso de porotos negros

¿Qué necesitás?

• 200g de porotos negros
• 300g de tomate triturado
• 30g de tomates secos hidratados
• 1 cebolla morada
• 1 batata mediana
• 1 zanahoria
• 1 verdeo
• 2 dientes de ajo
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• 1 hoja de laurel
• 1/2 cucharadita de clavo de olor molido
• 1 cucharadita de páprika
• 1 cucharada de salsa picante
• Tomillo
• Sal rosada y pimienta negra a gusto
• 1 taza de agua (300/350g aprox)

Paso a paso

1. Dejar los porotos en remojo, un mínimo de 8/12 horas. Yo le agrego un trozo de alga kombu. Luego tirar el agua de remojo, enjuagar bien y cocinar a fuego bajo con dos partes de agua, hasta que estén tiernos, y toda el agua se evapore. Reservar.
2. En una olla colocar el aceite de oliva y saltear por unos minutos la cebolla, el verdeo y el ajo picados. Luego agregar los vegetales en cubos, el tomate triturado, los tomates secos cortados, el laurel, el clavo de olor, la paprika, el tomillo, la salsa picante y el agua hasta cubrir los vegetales.
3. Tapar y cocinar hasta que la batata este tierna pero no se desarme.
4. Agregar los porotos, sal rosada y pimienta negra a gusto. (Y un poco más de agua si fuera necesario).
5. Cocinar por unos minutos más para integrar los sabores. Apagar el fuego y servir.

Sopa de vegetales y quinoa

¿Qué necesitás?

• 1 puerro picado
• 2 ramas de apio en cubitos
• 1 zanahoria chica en cubitos
• 1 trozo de repollo blanco en juliana
• 1/2 taza de quinoa cocida (puede ser arroz integral o el cereal que tengas cocido)
• 2 tazas de agua
• Aceite de oliva
• Sal rosada
• 1 cucharadita de semillas de hinojo
• 1 cucharadita de semillas de comino
• 1 cucharada de té de jengibre fresco rallado

Paso a paso

• Rehogar el puerro a fuego bajo. Luego agregar el apio, la zanahoria, el repollo y las 2 tazas de agua. Cocinar hasta que apenas ablande la fibra de los vegetales. Agregar la quinoa, las especias molidas y la sal rosada. Servir en una linda cazuelita que conserve el calor. Acompañar con semillas o cajú y espolvorear con perejil fresco picado y oliva para el aporte enzimático. **pueden ser activadas y deshidratadas o apenas tostadas.

Sopa de Brócoli

¿Qué necesitás?

• 1/2 flor de brócoli cocido
• 1/4 de cebolla blanca rehogada
• 1/2 taza de semillas de girasol activadas
• Sal rosada
• 2 cucharadas de oliva

Paso a paso

• Licuar todos los ingredientes con agua entre tibia y caliente hasta lograr una consistencia cremosa. Servir y  consumir en el momento. Acompañar con una rebanada de pan integral. La cebolla tiene que estar rehogada a fuego bajo para quitarle la acidez, que se vuelve dulce y de esta manera no altere el dosha. Para activar las semillas de girasol dejarlas en remojo por 6 horas. Luego tirar el agua de remojo, enjuagar y están listas para usar.
• Opcional: un puñado de hongos de pino hidratados.