Hoy queremos compartirte tres claves simples pero poderosas para que vivas un año positivo.

Establece, al menos, un propósito: Utilizá el mes de enero que lleva la energía capricorniana (Este signo te ayuda a concretar aquello que estaba solo en tu mente o lo mantenías en suspensión por no sentirte seguro) y Acuariana (Signo creativo y visionario que te aporta velocidad y desapego) para decretar un propósito o meta exclusiva para este año que estás comenzando.

Tener un objetivo claro, nos permite mantenernos enfocados, evitar desperdiciar energía en demasiados asuntos a la vez, nos aporta entusiasmo y motivación personal y hasta nos ayuda a dejar de lado posibles inseguridades. Porque nada nos hace sentir tan potentes como el dar nuestros pasos, caminar nuestro propósito con los pies, con las manos, con la mente y con el corazón.

Poné a circular la energía en tu hogar: Si aún no lo hiciste, este un momento clave para renovar la vibración en tus ambientes ¿Por qué? Porque esa limpieza y nuevo orden afectará positivamente tu estado interior y se trasladará a muchos de tus aspectos personales. Una energía estancada a nuestro alrededor nos hace sentir aletargados, sin poder, somnolientos de deseos y enjaulados o con poco espacio para crear y cambiar lo que haya que transformar en nuestra vida.

Cambiá de lugar los objetos, renová alguna pintura redecorando tus muebles, dejá ir aquello que no usás y que sabés bien que no vas a usarlo, desapegate del pasado animándote a soltar algo que represente algún momento o emoción que ya no quieras seguir cargando ni sosteniendo en vos.

Conectá con vos para sanarte: Todos tenemos aspectos por sanar. Tal vez sean relaciones, tal vez alguna emoción o manera de pensar que acaba por dañarnos o dañar a alguien más. Si tomás un momento para reflexionar acerca de tus años anteriores, seguramente observes que cada año, aparecen situaciones que revelan un área temática que tuviste que trabajar y aprender.

Iniciá el año (Y, en lo posible, intentá mantenerlo) brindándote un momento diario para estar con vos mismo, en soledad, en quietud, respirando y sintiendo tu propio cuerpo, tu mente, tu corazón. ¿Hay alguna sensación recurrente que hayas estado sintiendo? ¿Qué área de tu vida interna o externa sentís que necesita sanarse?