Con la llegada del otoño y los días más invernales, muchas personas experimentan bajas emocionales o la sensación inexplicable de angustia o tristeza. Hoy queremos compartirte los efectos de la luz solar sobre nuestras emociones para que tengas en cuenta su gran aporte en personas que padecen depresión.

La luz del sol actúa directamente sobre nuestro sistema nervioso y transforma nuestro estado anímico potenciando en nosotros un estado de mayor alegría y felicidad.

Se ha comprobado que recibir la energía del sol por las mañanas, siempre con la protección adecuada, nos concede beneficios importantes en nuestra salud, como por ejemplo, mejorar nuestro estado de ánimo, predisponernos con mayor positivismo durante el día, elevar nuestro sistema de defensas y aumentar nuestra vitalidad reduciendo la sensación de agotamiento o fatiga.

Además, el contacto con la energía solar permite que, por las noches, nuestro descanso y nuestro dormir se regulen naturalmente fluyendo en equilibrio y ayudando a reducir la tendencia al insomnio o al sueño entrecortado.

Si el cambio de estación te provoca cierto desorden anímico o angustia interior, te recomendamos organizar tu rutina diaria para intentar aprovechar al máximo los primeros rayos del sol. Dedicarte un paseo matutino bajo la luz natural, te ayudará a mejorar tu estado de ánimo, equilibrándolo y potenciando tu parte más luminosa.

Otros beneficios de aprovechar el sol:

• El sol es vida, es calor y energía. Entrar en contacto con él, es potenciar estas características en nuestro propio cuerpo.
• Estimula nuestro bienestar emocional y psicológico
• Favorece los niveles de Vitamina D encargada de mantener sanos nuestros huesos (Que a nivel emocional representan nuestra firmeza y nuestra solidez personal).