El entrenamiento de las artes marciales puede proveer diferentes beneficios para los chicos, entre ellos el control de la conducta agresiva, la ganancia del autoestima, autodefensa, autoestima, concentración, confianza y cortesía. Además de todo esto,también existe la posibilidad de fortalecer la mente y el cuerpo y lograr una mejoría no solo en el aspecto “físico” del deporte, sino también a nivel mental y emocional, según destaca Stacey Neumor, cinturón negro de Kung Fu y respetada artista marcial en un artículo de The Huffington Post.
Actividades como el Taekwon do, Kung fu, Karate, Judo, Jiu Jitsu y Aikido son una manera divertida para que tanto los niños como las niñas logren la aptitud y el enfoque. Algunos padres pueden pensar que también promueven la violencia, pero eso es un mito según los expertos. Las artes marciales realmente ayudan a enseñar habilidades de autodisciplina y socialización. De hecho, muchos padres cuyos niños tienen trastorno de déficit de atención o hiperactividad demuestran un gran avance con estas clases porque el autocontrol y la concentración son exactamente las habilidades subdesarrolladas en niños con aquellos trastornos, como explica una nota del sitio especializado Parenting.
“A los 6 años suele ser una buena edad para comenzar alguna de estas clases”, señala la doctora Mimi Johnson, miembro del Comité de Medicina y Aptitud Física de la Academia Americana de Pediatría en Parenting.
Beneficios de practicar artes marciales para los niños
Según una nota de la revista Live Strong, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan que los niños realicen una hora o más de actividad física diaria porque:
- Funciona como ejercicio cardiovascular y bueno para el corazón.
- Genera fortalecimiento muscular y óseo.
- Refuerza el concepto de responsabilidad en ellos, ya que deben llegar puntuales y vestidos para la ocasión, además de estar encargado de mantener el uniforme.
- El sistema de progreso a través de los colores del cinturón promoverán su sentido de ambición u autosuperación.
- Las técnicas de autodefensa pueden brindarle a un chico tímido un poco más de confianza en la escuela y la vida diaria, en relación con sus pares.
- Avanzar en los niveles del cinturón fomenta su autoestima, además de sentirse cada vez más capacitado para transmitir su conocimiento a otros niños en niveles inferiores de técnica.
- Incrementa la concentración, ya que las clases se basan en la relación con el maestro y su cuerpo y en estar enfocado en una sola tarea, lejos de los teléfonos celulares o los videojuegos.
- Genera conciencia acerca del respeto, ya que este principio es uno de los más importantes de esta práctica. La tolerancia hacia los demás se origina en el desarrollo de la autoconfianza personal. Las artes marciales enseñan a los niños que no tienen que probarse a sí mismos a otros niños, sino que son completos en sí mismos.