Sabemos que te encanta rociar tu espacio y tu cuerpo con preparados alquímicos y agüitas de alta vibración. La limpieza energética nos hace falta a todos y hoy te compartimos una receta que podés preparar en casa.

Splash de agüita rezada

Si, alguna vez, experimentaste algún tipo de bendición, tenés muy claro el bienestar que se siente al recibir palabras de amor, de buenos deseos, de futuros luminosos. Rezar o que nos recen, siempre aclara la energía y la vuelve más alta conectándola con lo sagrado.

El agua absorbe y se impregna de la energía que la rodea o que se plasma en ella, entonces, vamos a guiarte para que puedas fabricar tu propia agüita rezada y rociarla donde más lo necesites.

Tené en claro tu intención y prepará tu espacio

No lo hagas a las apuradas ni mirando el celular de reojo. Tomate un momento para aquietarte, respirar y conectar con lo que vos sientas y creas como sagrado. Cuando hayas entrado en sintonía, establecé tu propósito de rezo, por ejemplo, a tu agüita podrías querer intencionarle que atraiga salud y limpie síntomas físicos de quienes viven allí, también podrías estar necesitando reducir las tensiones y alcanzar un mayor nivel de calma y fluidez o, quizás, estés requiriendo una mejor compañía.

• Prepará un frasco de vidrio con agua mineral y un cristal, según tu propósito (Por ejemplo, para salud un cuarzo verde, para abundancia una piedra del sol, para relaciones sanas un cuarzo rosa o rodocrosita, para vitalidad y movimiento un cuarzo cristal).
• Ubicate en el espacio que más te guste (Al aire libre o en tu altar es ideal) y abrí tu rezo, visualizando esas energías que querés transmitirle al agua para después ingresarlas a tu ambiente.
• Afirmalas en voz alta sosteniendo el frasco con agua en ambas manos y elevándolo hacia el cielo. Sentí la recarga, la impregnación.
• Ahora introducí el cristal que hayas elegido y dejalo que se cubra de agua para potenciar y maximizar tu rezo.
• Cerrá tu trabajo enunciando una oración sagrada de la línea en la cual creas.
• Durante 24 horas seguidas, dejá tu frasco en tu altar para sellar la energía.
• Al día siguiente, trasladá tu agüita con cristal incluido a una botella con rociador y disfrutá de tu splash personal.

Extra tip: Si te gustan las plantas y flores, también podés reemplazar los cristales por hojitas o pétalos de aquella planta que vierta las propiedades similares a las que buscás vibrar.