Ok, todavía no te fuiste de vacaciones, pero no tiene que ser tan grave. Muchos de nosotros, aún no hemos podido tomarnos el descanso o los días necesarios para desconectar de la rutina, pero esto no tiene que impedirnos disfrutar de nuestro lugar. Te vayas o no de viaje, hay ciertas  formas de disfrutar de tu ciudad y hoy te compartimos algunas caves:

Desayuna donde más te guste: Todos tenemos un espacio favorito donde nos gusta desayunar y comenzar nuestro día. Buenos Aires, te ofrece múltiples opciones para que tu mañana se convierta en un verdadero momento inspirador. Si, en cambio, sos de los que prefieren estar en casa, entonces, mañana trata de despertarte un poco más temprano y disfruta de armarte el desayuno que más te guste. El comienzo de nuestro día, define la energía de toda la jornada.

Que cada día te inspire: Reflexiona acerca de qué elementos o actividades te inspiran y, sin excusas, acciónalos al menos una vez al día. Si lo que te gusta, por ejemplo, es leer, entonces organiza la agenda para que a lo largo del día, al menos por un rato, puedas dedicarte esa lectura que tanto te gusta. No es el fin del mundo y sabes que podes lograrlo.

Tarde de reencuentros: Por más que estés trabajando, siempre hay alguna parte del día que queda libre para atender otros asuntos. Bueno, hoy no atiendas esos asuntos o atiende menos, y utiliza tu tarde para encontrarte con amigos o dedicarte un paseo liberador. Compartir con otros, siempre, nos renueva las energías y nos ayuda a mantener el corazón abierto.

Relax total: Tal vez, no te alcance el presupuesto para tomarte una semana en las afueras, pero si lo revisas puedes encontrar opciones para relajarte. Una sesión de masajes, una tarde de spa con amigas o una reposera confortable para disfrutar del sol de tu jardín, pueden ayudarte sin realizar una inversión tan grande, pero aportando calma y relajación a estos días de verano que todavía nos acompañan por un tiempo más.

Estemos donde estemos, es importante recordarnos a nosotros mismos que una de las claves para estar en armonía es conectarnos con aquello que nos rodea y amar nuestro lugar. Disfrutemos lo que tenemos a nuestro alrededor.