¿Estás a menudo bajo presión y con la sensación de que no llegas con todo? ¿Por momentos te sientes apático o irritable, o con cambios de humor? ¿Te resulta difícil separar los pensamientos del trabajo y relajar? El síndrome de Burnout es un estado de agotamiento mental severo, que puede provocar enfermedades físicas o psicosomáticas. Y hay que estar muy atentos para prevenirlo a tiempo.
“La pandemia impactó en la mayoría de los trabajadores debido a la incertidumbre, el aumento del nivel de estrés, la pérdida de libertad, la falta de nuestra cotidianeidad, y en algunos casos, la imposibilidad de ejercer la actividad laboral como la conocíamos, o la adopción del teletrabajo. Así fue como el home office, el aislamiento, los cambios de rutinas y actividades familiares, el miedo a contraer la enfermedad y el encierro, actuaron en cada uno de nosotros de manera negativa, y favorecieron el agotamiento”, explica la doctora Silvina Ferraro, especialista en medicina laboral en DIM Centros de Salud.
Por su parte, el doctor Juan Stabile, traumatólogo y especialista de DIM Centros de Salud, explica que el síndrome del trabajador quemado/agotado (Burnout) está vinculado con el ámbito laboral (el estrés causado por el trabajo y el estilo de vida del empleado): “Puede tener consecuencias muy graves, tanto a nivel físico como psicológico: depresión y ansiedad son las más comunes. Pero también, las consultas más frecuentes abarcan patologías con síntomas como dolor cervical, dolor en región lumbar, dolores articulares, mareos y cefaleas”, detalla Stabile.
Debemos tener en cuenta que durante todo este año de pandemia, la mayoría pasamos al modo tele-trabajo o home office, lo que nos llevó a estar largos períodos sentados y en muchos casos en posiciones inadecuadas para el cuerpo: “Una gran parte del trabajo en casa se hizo por lo general con mobiliario no adaptado para dichas tareas. Y si bien este síndrome no se relaciona estrictamente con la postura, una zona de trabajo acorde, un ámbito laboral sano y un trabajo en equipo, disminuyen las probabilidades de padecerlo”, comenta Stabile.
¿Qué podemos hacer para evitar todo esto? El especialista comparte algunas recomendaciones:
- Levantarse de la silla de trabajo cada 40 minutos, por cortos períodos de tiempo. Realizar micro-pausas de descanso. No cruzar las piernas.
- Usar medias de compresión.
- Hacer ejercicios para evitar molestias: flexión de los dedos y los pies, movimientos circulares de los tobillos, andar sobre la punta de los pies y sobre los talones. Todo esto favorece la circulación sanguínea. También trabajar la elongación y movilidad de cuello, miembros superiores e inferiores.
- No esperar a sentir algún dolor muscular o articular para cambiar posturas o tomar descanso.
- Alejar la mirada del monitor cada tanto.
Pero además, es importante acondicionar el espacio y las rutinas de trabajo en casa, para que estos cambios no nos afecten tanto. Para eso, la doctora Ferraro suma algunos tips más:
- Para estar en un espacio laboral sano, debemos elegir un lugar de la casa que nos garantice iluminación, ventilación y mobiliario cómodo. Es importante contar con luz natural que no impacte en forma directa sobre el monitor de la computadora.
- Lo ideal es contar con una silla confortable donde poder apoyar bien la espalda, y utilizar una superficie de apoyo amplia y cómoda para colocar computadora y brazos.
- Establecer rutinas reorganizando los espacios y los horarios con la actividad familiar.
- Tener un horario para el almuerzo y tomarse espacios para breves descansos y estiramientos.
- Realizar alguna actividad aeróbica para combatir el sedentarismo y bajar el riesgo cardiovascular. También podemos hacer ejercicios de mindfulness que ayuden a disminuir el estrés (hay varias propuestas en aplicaciones móviles que están al alcance de todos).
- Para evitar dolores lumbares, articulares, de cabeza, debemos prestar atención en nuestra postura colocando el monitor de la computadora a la altura de nuestros ojos, los hombros relajados, la espalda bien apoyada y los brazos sobre la mesa.
Más info en dim.com.ar o en @dimclinicaprivada