Ser Positivo se puso en contacto con la especialista en fitomedicina holística, María Belén Santos* y la farmacéutica y fitoterapeuta Florencia Fasanella** para conocer más acerca de los remedios naturales disponibles para tratar las molestias del síndrome premenstrual en las mujeres.

• ¿Qué posibilidades naturales tenemos si lo que buscamos es disminuir el dolor y las molestias del síndrome premenstrual?

Según María Belén, “lo primero que hay que tener en cuenta es que la sangre es un líquido con una densidad mayor que la del agua, por lo tanto a veces tiende a coagularse y eso impide que fluya hacia afuera sin dolor. Así que lo más afectivo es algo muy simple: ¡tomar agua! desde unos días antes o incluso apenas empiezan las señales de la pronta llegada de la sangre lunar: pechos y piernas pesadas o inflamadas, tensión abdominal, pulsaciones internas en el útero, mayor sensibilidad emocional…

En la mayoría de los casos, solo con aumentar la cantidad de agua que tomamos durante el día ceden las molestias, ya que se diluye la densidad de la sangre y esto ayuda a que fluya más libremente”.

“Existen muchísimas plantas que nos pueden ayudar en este período, especialmente aquellas que ya conocemos y nos hacen sentir en casa y amadas. Para algunas mujeres es el cedrón, el tilo o la manzanilla que le hacía la abuela cuando le dolía la panza”, sostiene la especialista.

“Más allá de esta afinidad personal, hay algunas hierbas que ayudan específicamente al sistema reproductor femenino, como la salvia, que tiene estrógenos naturales, y esto nos ayuda muchísimo para equilibrarnos emocionalmente; la artemisa, diosa guerrera, o la melisa, que es la gran mamá de las plantas.

Igualmente, lo primero que hay que tener en cuenta es la afinidad entre la planta y la mujer dolida. Sólo puede ayudarnos aquello con lo que nos sentimos compatibles. Y eso se siente porque nos sentimos atraídas por el olor, por el sabor, por el tamaño de la planta, por dónde crecen o por el color de sus flores”, explica Belén.

Por otro lado, Florencia nos indica: “Para ayudarnos a disminuir las molestias menstruales es importante, primero que nada, aceptar nuestra femineidad. Somos cíclicas, cambiamos, mutamos. La esencia femenina nos recuerda todos los meses la importancia de dejar ir, y eso es lo que debemos hacer cuando menstruamos.

Además de esto, hay hierbas que nos ayudan a calmar estos malestares, ellas son las hierbas con principios activos antiinflamatorios (podríamos decir, de alguna forma, que es como tomarse un “ibuprofeno natural”). Son Manzanilla, Jengibre, y Cúrcuma. Basta con hacernos una infusión y comenzar a tomar alguna de ellas 4 días antes de que nos venga la luna (menstruación) y continuar tomando cuando nos viene, hasta que lo sienta necesario (generalmente, al día 3 ya no es más necesario)”.

• ¿Existen algunos ejercicios para el mismo fin?

Florencia sostiene que “sí, existen ejercicios que nos ayudan a acompañar la toma de plantas. El más simple consiste en respirar hondo llevando el oxígeno hacia el abdomen y visualizando que una luz rosa nos llena el útero de amor (nos abraza)”.

“También, cuando era chica recuerdo que mi mamá me preparaba una bolsa de agua caliente (puede ser un paño o toalla caliente) y la colocaba sobre mi útero: el calor es un buen y efectivo calmante en los momentos donde no nos podemos mover del dolor”, desarrolla la farmacéutica.
Por su parte, Belén nos señala: “Como ejercicio recomendaría levantar las piernas para favorecer el retorno venoso en la circulación de la sangre y descansar o hacer algo creativo. No hacer lo que ‘teníamos’ o ‘debíamos’ hacer, ya que este es un momento profundamente creador, de duelo de lo que no fue y de hacer espacio para lo nuevo, de sostener el vacío. Por eso, otro tipo de ejercicio que podemos hacer tiene que ver con esa capacidad de vaciar y contener, de volver a vaciar y volver a contener.

El útero es capaz de hacer nido una y otra vez y amar sus semillas como posible fruto todas las veces. Y sobre todo, es capaz de soltar esas semillas con naturalidad, sabiendo que eso es parte del ciclo que repetirá muchas veces y va a soltar con naturalidad aún cuando sea la última semilla. También va a cuidar de ella si fecunda, y la va a alimentar con su propia sangre, hasta que sea lo suficientemente fuerte para emerger al mundo. Y acá volverá a soltar.

Esta capacidad del útero es la que nos cuesta en nuestra vida cuando está dolido. Cuando hay un duelo antes de soltar la sangre, las contemplaciones que podemos hacer tienen que ver con nuestra capacidad de amar y cuidar sin miedo a perder, de contener y de soltar, tal como las nubes se disuelven a si mismas en gotas, y siguen siendo siempre agua.

• ¿Es perjudicial tomar alcohol o fumar durante este período del mes? ¿Por qué?

“La dieta es importante, ya que según la medicina china los dolores menstruales pueden surgir por varias cosas (como por ejemplo, provenir de desarreglos en distintos órganos), por lo que si intoxicamos el cuerpo con alcohol o alimentos que nos inflaman y no nos nutren, éstos beneficiarán los malestares”, asegura Florencia.

Belén coincide, ya que para ella, “tanto tomar alcohol como fumar son acciones que deshidratan el cuerpo y, por la coagulación de la sangre y el dolor que conlleva, ninguna de las dos son recomendables”.

• ¿Hay alguna otra sustancia o actividad que debamos evitar durante el PMS para que sea más llevadero este proceso?

“Principalmente, debemos evitar el ‘debemos’ y, en tal caso, ponerlo de nuestro lado. Sería algo así: ‘debo en este momento dejar ir, ya que está muriendo, algo para lo que se preparó mi cuerpo durante todo un ciclo, y debo ser lo más amable que puedo llegar a ser conmigo. Debo complacerme. Sentirme. Comer helado si me gusta el helado, mirar esa película que hace días que quiero ver, ir al cine o mirar el río… debo ser llenada de mimos o debo hacérmelos yo. No debo tomar ningún analgésico que me aleje de lo que siento para poder responder productivamente a un sistema que me ve como fuerza de trabajo. Soy lo que soy, soy mujer y tengo mis ciclos'”, explica Belén.

Por otra parte, Florencia nos comparte, en consonancia con su colega: “Tenemos que ser conscientes de que somos mujeres: abrazar nuestra femineidad, parar cuando necesitamos parar (la sociedad es más bien activa y masculina, y no da mucha posibilidad de que paremos), estar solas si lo necesitamos, pero más que nada escucharnos. Una vez escuché que lo que más enferma es la incoherencia y creo que es así. Si vamos a tomar plantas, hacer ejercicios y comer sano con el único objetivo de no parar nunca, eso tampoco nos hace bien. Amémonos, así podemos cuidarnos de la forma en la que lo merecemos”.

*María Belén Santos (Belem Azull) trabaja con plantas medicinales desde hace quince años. Desde el 2008 brinda cursos y seminarios intensivos sobre medicina holística y fitocosmética en diferentes lugares (Brasil, España y Argentina). Tiene una marca de fitocosmética natural propia: Alas Herbal, laboratorio alquímico poético. Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Mar del Plata. Su formación fitoterapeútica es intuitiva, autodidacta y experiencial, de conexión con la naturaleza, transmisión directa de herboristas y de lectura investigadora. Hizo cursos de terapia bioenergética, alquimia operativa teúrgica, espagiria, theta healing, biodescodificación y registros akáshicos. Es focalizadora de Fitomedicina Holística (Alquimia Ancestral) desde marzo del 2015 y creadora del método de lectura corporal a través de la sintomatología del cuerpo físico: Decodificación Fisioanalógica.

IG: @BelemAzull @AlasHerbal @fitomedicinaholistica (Alquimia Ancestral)

**Florencia Fasanella es farmacéutica, fitoterapeuta, descodificadora y terapeuta floral.
FB: Florecer- Medicina Natural
Mail: florfloreciendo@gmail.com