Llevan cientos de años practicándose en diferentes partes del mundo y hoy te contamos por qué son una excelente manera de entrenar tu cuerpo, tu mente y tu espíritu. ¿Te animás?
La práctica se acompaña de filosofía
Una de las cualidades más interesantes de las artes marciales es que son enmarcadas en una filosofía que promueve, mayormente, la conexión con nuestra energía, el aprendizaje sobre cómo regularla, aumentarla y percibirla, el contacto con nuestra respiración para alinear la mente y el cuerpo. Generalmente, tienen ejercicios de meditación complementarios a las prácticas.
Fortalece tu cuerpo y tu seguridad
Entrenarnos en artes marciales, además de permitirnos fortalecer y ejercitar nuestro cuerpo físico a nivel integral, nos ayuda a trabajar la autoestima y la seguridad, porque nos conecta con nuestra fuerza y nuestra capacidad de defensa.
Concentración
Un enorme beneficio, sobre todo en estos tiempos, es que al practicar artes marciales, nos entrenamos, también, en el arte de la concentración. Sus técnicas y ejercicios nos ayudan a enfocarnos mejor, a dirigir energía, cuerpo y mente hacia un movimiento puntual. En tiempos donde a cada segundo estamos bajo diferentes estímulos, impactos, cambios y distracciones, saber concentrarnos es una gran virtud.