Desde el Feng Shui podemos acceder a diferentes herramientas para armonizar el flujo de energía en nuestros espacios y, a su vez, reflejar esta armonía en nuestra vida cotidiana. Este arte milenario nos entrega una gran cantidad de curas y consejos para que podamos obtener una energía o Chi lo más limpia y abundante posible, de la mejor calidad para atraer abundancia, prosperidad, amor sano y, sobre todo, el disfrute de un espacio armónico y funcional.

La puerta principal de la casa es una de las zonas más importantes y debemos estar atentos a no descuidar su entorno y su decoración, ya que representa la principal vía de acceso energético al hogar. Es la boca del Chi, la puerta de acceso a la energía que circulará a lo largo de todos los ambientes.

Por eso, te compartimos algunas sugerencias para que puedas activar la entrada de una vida prospera, sana y armónica:

El camino de entrada: Es aconsejable que la puerta principal no dé directamente hacia la vereda. Lo ideal es tener un espacio o sendero previo por el cual distanciar un poco el ingreso de la casa para resguardarla. Este camino hasta la puerta no debe estar descuidado. Muchas veces, no le damos importancia pero es fundamental comprender que si ese sendero se encuentra sucio, desalineado, vibrará en forma baja y afectará la energía que ingresa al hogar. Por eso, elegí plantas, colores y objetos que te den alegría y provoquen y atraigan una buena entrada de energía.

No interferir el ingreso: Es aconsejable que delante de la puerta no haya postes, árboles o estructuras enfrentadas directamente, ya que provocan un freno a la energía que viene circulando desde afuera y detendrán el ingreso. Funcionan como un estorbo y generan estancamiento, dificultando la entrada y la salida del Chi.

Orientación cardinal: Otro aspecto importante para profundizar en el Feng Shui de la puerta principal es tener en cuenta a qué punto cardinal corresponde esa entrada. De acuerdo a cada zona, existen elementos y colores que corresponden y armonizan esa vibración. Por ejemplo: Una puerta orientada al Este corresponde al elemento madera, entonces, puedes optar por poner plantas (Vivas, no artificiales) y tonalidades verdosas.

Date la Bienvenida: Lo que encontramos al abrir la puerta, habla mucho de lo que pasará en el resto de la casa: Nos invita o nos despide. Por eso, es importante que si la puerta abre hacia un sector amplio o hacia una pared, dispongamos de un pequeño recibidor que nos invite realmente a pasar. Una imagen que de alegría, sensación de orden, de paz, de llegar a nuestro hogar.

Anímate a crear una entrada que te guste, con sutileza y calidez pero, a su vez, que sientas que represente la energía de tu espacio. Recorda que la entrada representa la primera impresión de la casa y, tal vez, la abundancia, la prosperidad y la armonía, al igual que muchos de nosotros, crean en el amor a primera vista.