Te invitamos a que sumes estas prácticas a tu lista de intenciones para el nuevo año. Pequeños y enfocados pasos, darán grandes y positivos avances. Tu vida vale y mucho. Nutrila bien:
Mové tu energía y sanala: Esto es muy importante y tiene que estar presente. Mover la energía de nuestro cuerpo y de nuestros espacios ayuda a sentirnos mejor y transforma el estado del cuerpo y de la mente. ¿Cómo lograrlo? Caminando tres veces por semana, eligiendo un deporte o actividad que nos haga distender y fortalecer el cuerpo, rodearnos de naturaleza, cambiar el orden de los muebles en los ambientes y deshacernos de aquello que no utilizamos o no nos vibra bien al mirarlo. No permitas que tu energía se estanque.
Proponete mejorar tus vínculos: Si o si y el cambio es ahora. Construir y rodearnos de vínculos sanos, amorosos y libres resulta fundamental para nuestra vida. Tratemos de evaluar aquellos que sostenemos aunque ya no nos hagan bien y dejémoslos ir o dediquemos una oportunidad de reconstruirlos. Perdonemos, amemos, brindemos corazón y eliminemos las demandas tóxicas. Hemos preparado una nota especialmente sobre este tema que podes leer para orientarte.
Mantenete inspirado: Capacitate, buscá aprender más de aquello que te gusta, inscribite a talleres o actividades que te inspiren y te conecten con tu parte creativa. Iluminá tu vida desde el disfrute y la armonía que genera utilizar tu energía y tu tiempo con verdadera consciencia de aquello que te hace mayor bien.