¿Sentís que tu lugar de trabajo está estancado? ¿Que hay energía densa y poco fluida o que la abundancia no se acerca a tus proyectos? Muchas veces, es necesario prestar atención al clima energético que estamos creando y proyectando sobre nuestros espacios y detectar allí los posibles causantes e impedimentos.
Desde el Feng Shui podemos aplicar algunas herramientas para favorecer diferentes propósitos creando ambientes armónicos y alineados con las energías naturales del lugar. Hoy te proponemos reflexionar sobre cómo potenciar tu espacio de trabajo para tus negocios y proyectos fluyan con éxito y prosperidad.
- Revisá tu actitud. Lo primero que tenemos que observar, antes de generar alguna modificación física, es nuestra actitud con el dinero y nuestra posición frente a la abundancia. Porque si bien todos creemos estar deseando y atrayendo la prosperidad, la verdad es que muchas veces, hay ciertos mandatos que arrastramos por modelos familiares o educacionales en donde están arraigados los miedos al desafío, la actitud de no creernos merecedores de abundancia o, simplemente, una vista poco agradable sobre el dinero como si fuera el causante de males o desequilibrios en las personas. Por eso, es necesario activar nuestra autoestima y la certeza de que somos merecedores de éxito y prosperidad en nuestros proyectos. Nuestro tiempo vale y nuestras creaciones también.
- Una puerta es una oportunidad. Tu escritorio no debe estar de espaldas a la puerta ya que se dice que estamos propensos a los engaños, estafas y no tenemos la llegada en control. Intentá ubicar tu mesa de trabajo siempre en una posición en la cual veas la puerta de entrada sin tener que voltearte. Esto te brindará tranquilidad y seguridad psicológica mientras realizas tus actividades. Además, a través de la puerta ingresan oportunidades y negocios, por lo tanto, tenemos que estar de frente para disponernos a Recibir. Por otra parte, mantené en buen estado tu puerta, pintala, arreglá lo que no ande bien, como un picaporte trabado o una cerradura que falle. La entrada debe verse atractiva, prolija y sana porque sino no invita a la llegada de energía prospera.
- Equilibrio Yin Yang: Al ser la oficina un lugar de trabajo debe predominar la modalidad energética Yang que invita a la actividad, a la creatividad y al movimiento para que los proyectos y las ideas se renueven y nos mantengan inspirados. Para lograrla, utiliza colores y decoraciones activas, pero que no sobre carguen porque sino potenciaras el estrés. Tonalidades amarillas, verdes, naranjas que invitan a la actividad y al intelecto y no abruman como sí lo hace un rojo furioso. Pero como todo debe tener un equilibrio, es fundamental incorporar elementos Ying al espacio, para que haya armonía. Por eso, debemos sumar algunos objetos en colores suaves o cuadros, no muy grandes, con imágenes que inviten a estar relajados (Pero no dormidos porque necesitamos proactividad) en nuestro espacio de trabajo. Por ejemplo, alguna música suave que permita un sonido agradable mientras trabajamos. También, puedes sumar un carrillón metálico para con su sonido armonice las vibraciones (El metal corresponde a la modalidad Yin).
- Liberá espacios. Evitá disponer variedad de estantes y sobrecargarlos con libros y cajas, ya que nos imprimen una sensación de agobio, de tareas interminables y de falta de tiempo y espacio.
- Sacá la Marie Kondo que hay en vos. Animate a desprenderte de todo aquello que realmente no estés usando y sepas que no vas a utilizar. No guardes cuadernos viejos, papeles acumulados o impresoras rotas que piensas arreglar en un futuro. Si no lo has hecho, no lo harás. Son excusas y necesitas desprenderte porque esa acumulación, genera un Qi estancado y no provee ni abundancia ni energía vital. Al contrario, contamina el ambiente. Tener muchas cosas rotas o en desuso, es lo mismo que tener la oficina llena de residuos. Además
- Respaldo estable. A tus espaldas, intentá no tener una ventana, sino una pared o superficie firme. Se dice que esto genera estabilidad y solidez porque ese respaldo funciona como una energía guardiana y protectora que brinda seguridad psicológica y te permitirá trabajar concentrado y tranquilo. Del mismo modo, evita tener estantes sobre la cabeza o vigas que bajen el techo, ya que proporcionan una sensación de ahogo y asfixian tu lugar de trabajo.
- Llamado a la prosperidad. Incluir objetos o imágenes asociadas a la abundancia como las moneditas chinas o una estatua pequeña del Buda Chino de prosperidad, contribuyen a recordar el llamado del éxito. Te predisponen con una actitud ganadora de enfoque y generadora de abundancia sana proveniente de un espacio con buena calidad de energía.
Nuestro lugar de trabajo y oficina debe proporcionarnos una experiencia agradable, tanto en su decoración, como en su limpieza y energía. La idea es trabajar lo más armonizados, inspirados y creativos que nos sea posible y para eso la vibración del espacio debe ser saludable. Recuerda que tus pensamientos influyen sobre el lugar y necesitas sentirte valorado y motivado. Predisponte a recibir prosperidad y agradece tus logros cada día. La energía se irá renovando y potenciando a través de un espacio sano y una mente positiva.