La rosácea es un trastorno de la piel que se manifiesta con manchas rojizas en la frente, las mejillas, la nariz y el mentón. El consumo de ciertas bebidas o alimentos, los cambios de clima, una exposición prolongada al sol o el uso de algún cosmético, dilatan los vasos sanguíneos y esto provoca el cambio de color. Si sos de las que padecen estas molestas manchas rosas, es hora de dejar de sentirse incómoda y avergonzada. Con estos trucos caseros, podrás disimular la rosácea fácilmente.
Maquillaje
El primer paso antes del maquillaje es limpiar correctamente el cutis. Debés comenzar utilizando un gel o leche que no contenga jabón, grasa ni perfume, enjuagarte con abundante agua tibia (jamás caliente) y secarte muy suavemente. Evitá los tónicos y los astringentes, ya que al estar hechos con alcohol pueden dañar aún más tu piel. Seguidamente, aplicá el medicamento tópico para la rosácea que usás habitualmente y dejelo secar por media hora. Luego, aplicate una crema hidratante* y protección solar si es necesario, y así estarás lista para comenzar a maquillarte.
- Utilizá un pemier que proteja la piel de los cosméticos y luego un corrector de color verde para que tape el tono rojizo del cutis. El producto que elijas no debe ser muy denso y debe ser fácil de difuminar para no irritarte más cuando lo apliques. Es altamente recomendable usar una esponja.
- Para lograr el aspecto uniforme, aplicá normalmente una base de maquillaje pero asegurate de que esta sea ligera, hidratante y sin grasa. Para finalizar sellalo con polvo utilizando una brocha suave. El rubor no será necesario ya que tu cutis tendrá mucho color.
- Optá por sombras y lápices de ojos en colores neutros, ya que al contener menos pigmento, serán menos irritantes. También evitá los tonos rojos en la boca para no intensificar el aspecto de enrojecimiento en la piel.
*Hidratación constante
En invierno, es importante proteger tu piel del frío con cosméticos muy hidratantes. Lo ideal es utilizar productos con ingredientes activos que refuercen la estructura los capilares sanguíneos.
Alimentos
Otra manera de combatir la rosácea es utilizando hierbas naturales con propiedades antiinflamatorias y plantas antimicrobianas que eliminen los microorganismos que causan este trastorno.
Masajearse la zona afectada con manzanilla y aceite de oliva y manzanilla es un buen remedio para tratar la inflamación y posibles infecciones; y limpiarse el cutis con vinagre de manzana antes de dormir ayuda a eliminar los residuos generados durante el día.
A la par, es fundamental seguir una correcta alimentación. Las vitaminas B y C, por ejemplo, atenúan los efectos de la rosácea y mejoran el estado de la piel; y las frutas, verduras y pescados mantienen el organismo depurado y libre de toxinas. También es importante evitar los alimentos con muchas especias, los cereales integrales, quesos fermentados, las bebidas calientes o alcohólicas y el café.