Alguna vez al despertarte, ¿notaste una capa pastosa de color blanco, amarillo o verdoso sobre tu lengua? Eso significa que tu cuerpo puede tener una acumulación de impurezas digestivas y, a largo plazo, esto podría comprometer tu sistema digestivo y el sistema inmunológico.
En este sentido, el raspado de la lengua (Jihwa Prakshalana, en sánscrito) es desde hace más de 5 mil años una parte fundamental de la rutina diaria recomendada por la medicina Ayurveda.
Su práctica tiene grandes beneficios para la salud genera y resulta una desintoxicación para el cuerpo en su totalidad.
Beneficios
La limpieza de lengua ayuda elimina ese tóxico recubrimiento antes de que sea reabsorbido por el cuerpo. De esta manera, evita que se vea afectado tu sistema inmune y previene problemas respiratorios.
Por otro lado, la lengua es la entrada al sistema digestivo. Mantenerla libre de tóxinas a un funcionamiento óptimo del proceso digestivo, ya que activa la producción de saliva y promueve que el “fuego digestivo” del cuerpo (agni) deshaga la comida. Clave: si tu digestión es fuerte y estás comiendo adecuadamente, al despertarte tu lengua debería tener un color rojo y muy pocas impurezas.
Además, mejora el aliento y previene infecciones. Las bacterias de la lengua, además de causar halitosis, también pueden desplazarse por el resto de la boca y causar caries, gingivitis, infecciones de garganta, afecciones al sentido del gusto hasta incluso cáncer bucal.
Otro de sus beneficios es que a medida que se eliminan las capas de bacterias y flemas de las papilas gustativas, aumenta el sentido del gusto y el sabor en los alimentos se siente con mayor agudeza.
Paso a paso
- Al levantarte, cepillate los dientes sin pasta deltal y limpiá tu lengua con un raspador, un cepillo dental o una cuchara desde atrás hacia adelante.
- Tomá un vaso de agua tibia con limón en ayunas para limpiar el estómago, hígado, intestino y riñón, y estimular los movimientos naturales del sistema digestivo. Desayuná luego de 30 minutos.
- Cuando termines de comer, volvé a lavarte los dientes, esta vez, con pastal dental.