Ya sabés que estamos transitando el signo de Virgo y que una de sus principales acciones es la de purificarnos. Se trata de un tiempo de limpieza y de soltar para un mayor bienestar. ¿Qué sentís que tenés que dejar ir?
En el fondo ya lo sabés, lo venís sintiendo desde hace tiempo. Te hace mal cada vez que lo pensás o que lo nombrás. Te entristece, te hace transitar soportando una gran carga. Quizás sea una relación del pasado, un sentimiento de culpa, un viejo enojo, una versión de vos que vivía desde el miedo, un no animarte al cambio. Un trabajo que te mantiene seguro pero estancado y sin brillo. Una carrera que te diste cuenta que no era para vos, pero te atemoriza el defraudar a alguien más.
Soportar lo que nos daña y nos pesa, es una forma de auto maltrato, pero sobre todo es una fuente de intoxicación. Y ya no queremos vivir así. Queremos renovarnos, limpiarnos, poder vibrar para atraer la abundancia y la alegría a nuestra vida.
Eso ya no tiene que viajar con vos
Entonces, Alivianá el corazón, la memoria, la mochila. Aligerá tu viaje personal para poder moverte con fluidez, con alegría y sabiendo estar en el presente honrando tu propia vida. Sea lo que sea que sabés que debe irse, déjalo ir. Ya no lo cargues más en tu trayecto. Abrí tus manos, tu pecho, tu mente y tu cuerpo y, con amor, soltalo.
Para empezar a vivir la vida que querés, necesitás despedirte de la que ya no querés seguir viviendo.