En esta nota continuamos contándole a los últimos seis signos sus predicciones y desafíos del año. ¡Feliz transito 2016!
Caballo: Si bien el año anterior, puede que los caballos hayan pasado un período de pago y puesta al día con deudas y personas, en el año del mono ya están estables nuevamente. Aunque su estabilidad siempre incluye estar viajando, moviéndose. El cambio que deberán transitar y aceptar (Para poder fluir) es en las Creencias. Flexibilizando viejos criterios muy arraigados y, sobre todo, entendiendo que si elegimos situaciones, personas o proyectos traicionando alguna parte nuestra, entonces no hay chance de salir airoso. Buscar admiradores puede resultarle fácil al caballo, pero este año habrá que trascender esta modalidad, alineándose más por afinidad intuitiva que por ego. Sanar relaciones. Experimentará la creatividad en su máximo esplendor y a través de grupos de estudio, de nuevos trabajos, de actividades que lo armonicen, se abrirá a conocer sin tanta regla o prejuicio expandiendo su vitalidad y aprendiendo a conectarse con los otros de una nueva manera. Por eso, muchos sentirán comprometerse, avanzar a una relación más seria y hasta entregarse como, no lo han hecho antes.
Cabra: Este será un buen año para la cabra, con la llegada de lo que ha cultivado y los premios que se merece por su labor durante el año anterior. La meta está en cuidar lo que se ama y lo que fue tu foco de atención y trabajo durante el período previo. A no desenfocarse en demasiados proyectos nuevos. La energía orienta, mejor, a poder disfrutar y seguir nutriendo lo que ya empezaste (O, al menos, tenías en mente) y aún necesita tu amor. El mono le trae a la cabra celebración, nuevas inspiraciones, motivación para seguir o bailar en donde ya esté. Reconocimientos y, hasta, regalos que expandirán gratitud en su interior y su exterior embelleciendo su vida. El ciclo pasado tuvo demasiada lucha y esfuerzo, este es más para cosechar con mucho amor y alegría, lo cultivado, reponiendo las energías personales y recobrando la salud integral de su vida.
Mono: El propio año siempre es gran movimiento, reinicio, desafíos de evolución. Los monos del zodíaco, están en este viaje. El 2016 es una bisagra cósmica, un antes y un después. Todo lo que haya quedado pendiente (A nivel amor, profesión, dinero compartido, karma), este año se saldará y las miradas estarán puestas sobre él. Tal vez, se sienta exigido, demandado, pero con su gran carisma y talento, si pone atención y fluye con delicadeza, para el mono, este ciclo será de pura evolución y crecimiento. La concentración será la clave. A no marearse o firmar contratos sin leer hasta la última letra chiquita y tediosa. Cautela y humildad con el cuerpo, tratarlo bien, hacer détox (emocional, de pensamientos y de alimentos) y prácticas que ayuden a relajar tanta danza: Un viaje Yóguico sería ideal para armonizar el año y contar con la energía disponible y la mente clara para transitar este gran ciclo.
Gallo: El cambio y el aprendizaje para los gallos durante el 2016 es acerca de la confianza. No en sí mismo, sino en lo que el camino trae y en los demás. Aprender a delegar, aceptar que necesita ayuda en algunas instancias y que sigue siendo digno cuando la pide. Este año es para aprender a recibir, aprender a jugar reduciendo exigencia excesiva o pidiendo que alguien nos ayude a terminar el trabajo y lograr salir antes. Este año comprenderás profundamente que buscar controlarlo todo te drena gran parte de la energía y la salud. Eso ya no lo querrás más. Aprender a confiar hará que el gallo ilumine lo mejor de sí mismo, porque este es un gran desafío para él. Este ciclo es para poner a prueba la paciencia y la organización, ya que el mono activa energías un tanto caóticas para su gusto. Una clave o herramienta importante será el desarrollo espiritual, conectar con el llamado interno y vivirlo en la práctica.
Perro: El arte de aprender a respirar. Este año será para el perro un ciclo de re-acomodarse, de recuperarse y de buscar alienarse a personas y situaciones que le permitan estar en su centro nuevamente. Habrá que encontrar, en el caos, un nuevo orden, es decir, tal vez necesite transformar su manera de dar o de pedir (o las dos) para aprender a fluir mejor en cada instancia. Hay una sensación de necesitar más independencia que otros años, la fidelidad del canino este año es consigo mismo. Por eso, aunque cueste, tendrá que regular su labor de perfeccionista, justiciero o mediador con los aspectos que lo rodeen. Tendrá que comprender que hacemos mayor bien a los demás cuando nos dejamos curar por dentro, cuando nos devolvemos a lo que nos da equilibrio. Y aceptar que su cuerpo y su energía son hipersensibles y que necesita fortalecer aura y sistemas internos será la clave para dejar ir lo que intoxica o drena por dentro.
Chancho: Al igual que los demás, el chancho también transitará la revolución del mono en su año. Será un ciclo en donde lo que haya pulido el año previo, le ayudará y será la palanca clave para avanzar alienado. ¿Cuáles fueron tus mayores desafíos el ciclo anterior? ¿Qué aprendiste de ellos? Integrar conocimiento y experiencias, utilizar mayor planificación y eliminar caprichos que solo lo alejan del éxito personal. Con sabiduría y humor habrá que dejar ir el pasado, las creencias oxidadas y el impulso excesivo. Limpiarse para renacer y refundarse en un nuevo lugar. Darse y dar amor es siempre medicina para este signo y lo curará y preparará para el auspicioso ciclo siguiente.
¡Feliz año del mono para todo el zodiaco!