Utilizá esta técnica natural para refrescar tu piel durante el verano y aportarle limpieza y luminosidad. Recordá que en tu rostro se reflejan tus pensamientos, tus emociones y el estado interno de tu cuerpo.
Agua de rosas para quitar impurezas: Prepará un bol agregando pétalos de rosa y un poco de agua mineral fresca. Llevá este preparado al fuego y dejá que hierva por algunos minutos. Retirá del fuego y dejá reposar un momento, antes de colarlo. Pasá el contenido a un frasco con tapa y reposalo durante 24 horas más.
Al día siguiente, utilizá esta agua de rosas para enjuagar y limpiar suavemente toda la piel de tu rostro y tu cuello. Las rosas aportan suavidad y descongestión. Ayudate con un algodón pequeño para rebatir mejor las impurezas. Cuando termines, no seques tu rostro con una toalla, permití que tu piel se seque naturalmente con el aire del lugar.
Rodajas de pepino fresco: Cortá algunas rodajas de pepino fresco y apoyalas sobre tus ojos, tu frente y tus mejillas. Aprovechá este momento para relajarte corporalmente mientras realizás este facial vos misma. El Pepino refresca y aclara manchas, te permite rejuvenecer zonas con arrugas o líneas de expresión. Te ayuda, además, a descongestionar la zona debajo de los ojos y actúa como astringente en pieles grasas.
Hidratarte con Aloe Vera: Para terminar tu tratamiento, hidratá tu rostro y tu cuello con la pulpa natural del Aloe Vera que permite regenerar las células de la piel y cicatriza suavizando marcas. Deja un efecto terso y fresco aportando vitaminas y efecto anti age natural.
Claves efectivas:
- Realizá un pequeño masaje diario en toda tu zona facial cuando apliques o retires tus cremas de cuidado. Mové la energía permitiendo que tus productos actúen mejor.
- Incorporá jugos de frutas naturales y, al menos, tres litros de agua al día.
- Evitá secar tu rostro con fricciones o movimientos bruscos.