Muchas veces no sabemos qué más hacer para que nuestra relación con los recursos sea sanada y alcancemos un nivel óptimo de abundancia en nuestra vida. Hoy queremos repensar ciertas actitudes que, tal vez en forma inconsciente, nos están privando y limitando de una experiencia más expansiva:

No alegrarte por otros: Y Cuando digo “alegrarte”, digo “alegrarte sinceramente”. Muchas veces, no nos damos cuenta (Y otras, lo notamos perfecta y vergonzosamente) que cuando nos enteramos de un éxito o avance de otra persona en diferentes áreas de su vida, en vez de alegrarnos de corazón y compartir con ellos su alegría (Más allá de cómo nos esté yendo a nosotros en este momento), optamos por pensar o sentir internamente que “¿Por qué a nosotros no?” “¿Qué cómo lo hizo?”. Esta actitud es enormemente limitante porque bloquea directamente nuestro chakra cardiaco y obstruye el dar y recibir. Trabajemos este aspecto en nosotros revisando la manera de relacionarnos.

No poder hablar de dinero: Afuera el tabú y bienvenida la abundancia. Muchas personas experimentan dificultades a la hora de hablar de dinero, ganancias, negocios, sueldo y todo lo relacionado con nuestros ingresos. Generalmente, viene instalado en el modelo familiar en el cual se ha entendido que el dinero no es bueno o “tuerce” a las personas. Toda esta clase de ideas, son solo ideas limitantes y, aunque no lo parezca, interfieren muchísimo en nuestra conciencia de abundancia. Revisemos como es nuestro comportamiento con respecto al dialogo de estas temáticas. ¿Nos cuesta? ¿Nos hace sentir inseguros hablarlos?