Según la filosofía del Feng Shui, la densidad y el el ruido de la ciudad, la mala orientación de las construcciones y nuestros conflictos personales, generan energías negativas que se acumulan en los ambientes que habitamos y que deben ser depuradas.
Las esferas de cristal facetado tienen la capacidad de absorber, activar, distribuir la y equilibrar la energía en viviendas y espacios laborales.
Basta con colgarlas en lugares específicos y estratégicos que harán su trabajo, mientras brindan una sensación de bienestar en las personas que habitan o circulan.
Lugares fundamentales
- Cada vez que abrimos la puerta de casa se mezclan energías. Colgar una esfera en el pasillo o en el centro del recibidor mantiene el buen equilibrio del lugar.
- Delante de la ventana para que pueda canalizar la luz solar y proyectarla por toda la habitación en forma de arcoíris.
- En medio de puertas o ventanas que estén enfrentadas
- En pasillos largos o estrechos, ya que suelen acumular y mezclar energías.
- Los rincones olvidados y oscuros tienden a ser un foco de malas energías. La esfera no aportá luz pero sí ayudará para que todo fluya.
- Sobre escritorios de trabajo o estudio o cerca de su ventana. Sus efectos energéticos mejora el enfoque y aclara los pensamientos.
- Si la cocina y el comedor están en un único espacio, una esfera en alguna la separación imaginaria para mantendrá la energía ordenada.
Materiales
De acuerdo con la consultora e Instructora de Feng Shui, Susana Amorín, en Feng Shui Gong, para que las esferas sean realmente efectivas deben ser de cristal y estar hechas con un 30% de óxido de plomo, material que sólo se encuentra en los cristales de alta calidad. Cuanto mayor es el contenido de óxido de plomo, mayor es el brillo y el número de colores que refleja, asegura.
También son importante las técnicas de corte y pulido que se usen para fabrican las esferas, porque de ello depende el nivel de perfección.