Cómo te tratas a vos mismo, te tratan los demás

¡¡¡Date importancia!!!

 

El universo no está en tu contra. Todo lo contrario,  quiere tratarte bien y entregarte su abundancia. Pero para eso, debes mejorar una relación importante dentro de tu vida: La relación con vos mismo.

Es importante corrernos de ese lugar de victima que muchas veces ocupamos inconscientemente y dejar de molestarnos por cómo nos tratan o nos dejan de tratar en nuestras relaciones. Porque necesitamos comprender que así como nosotros nos tratamos, así nos tratarán los demás. Y resulta importante y nutritivo reflexionar acerca de nuestros propios permisos y mandatos para intentar ubicar de donde proviene la interferencia.

Veamos algunas sugerencias para mejorar nuestra autoestima y lograr nuestros objetivos y nuestras relaciones en forma sana y feliz.

Dedícate tiempo: Así como hay un momento para todo, hay también un momento para vos. Exclusivamente para vos. Anímate a invertir tiempo y belleza para vos mismo, realizando actividades que te inspiren, preguntándote acerca de lo que te hace más feliz y permítete no elegir ciertas conductas o personas que, aunque se presentan como aliadas, sabes bien que no vibran muy amigablemente. No hagas nada si no tienes ánimo de hacerlo, no se detendrá el universo porque te tomes un día libre. Al contrario, vibrará más alto porque te has permitido hacer lo que sentías.

Agradece tus dones: Conecta con tus habilidades esenciales y agradécelas. Te las han dado para que cumplas con tu misión del Alma, con tu plan de vida. Y debes honrarlas y ser consciente de ellas para poder ponerlas en práctica y compartir tus dones. Te vuelven único y merecen respeto. Son tu belleza personal e irrepetible. Tomate un tiempo para listar aquellos dones que crees poseer y, si así lo sientes, anímate a sumar aquellos que te gustaría despertar en vos. Estate orgulloso de vos mismo. Esto no te vuelve un vanidoso o un egocéntrico sino un Ser consciente de sus habilidades y agradecido de portarlas.

 

Descansa: Realiza “un no hacer” en forma consciente. Dedica tiempo a relajarte aprendiendo que de ese descanso, te nutrirás y estarás más creativo y potente en tus próximas actividades. Permítete disfrutar, no hacer nada si así lo necesitas, pasar tiempo contemplando o yendo al cine. Necesitas tener tiempo libre y lo más importante ¡¡¡Sin culpas!!! Escucha tu cuerpo y detente a tiempo.

Elige tus pensamientos: No te creas ni pactes con las palabras que los demás dicen de vos. Nadie está adentro de tu vida, ni de tu mente, ni de tu corazón. No les creas ni lo bueno, ni lo malo. Solo vos podes saber cómo te sentís y, a  veces, ni siquiera. Elegí pensamientos claros y firmes pero, a la vez, con flexibilidad para cambiar cuando te das cuenta que te has equivocado. Aprendiendo a ser conscientes de lo que pensamos, aprendemos a generar emociones más sanas e inteligentes, mejoramos nuestra manera de comunicarnos y balanceamos nuestras relaciones.

Di “no”: Aprende a ser consciente de tus límites sin estancarte, pero respetando tus necesidades y tus bordes. No tienes que ser complaciente todo el tiempo, sino sincero. Si necesitas decir que no, lo dices con el corazón. El mundo no se romperá por eso y la otra persona sabrá que lo dices de verdad. Protege tu espacio y tus creaciones, manteniendo activas tus necesidades emocionales. Si respetas eso, el Universo también lo hará.

Quererte no es ser vanidoso. Es amar tu viaje, tu oportunidad de vida, tus habilidades y tus dificultades para poder superarlas. Abrazarte y respetarte es generar una sintonía sana y armónica con aquello que te rodea y establecer una relación sana con tus propósitos y con tu Ser Interior. Por eso, ¡¡¡Date importancia!!! Y todo el universo conspirará para que así sea.

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